fuente: Diario Perú 21,opinion
En estos momentos, mientras usted lee este artículo, estoy en pleno viaje hacia el lejano Singapur. He sido invitado junto a La Pandilla Leche de Tigre para realizar varios eventos en el marco del Asia’s 50 Best Restaurants 2015. La cocina peruana llamada para animar el evento gastronómico más importante de Asia. Algo que quizás hace muy pocos años hubiera sido incomprensible hoy, sin embargo, es fácil de entender porque la cocina peruana ha conseguido llegar al corazón de todo aquel que ame la cocina, por más lejos que se encuentre del Perú.
Para ir calentando de información a la prensa mundial que asistirá a Singapur, hace unos días uno de los blogs gastronómicos más importantes del mundo, Fine Dining Lovers, me pidió que listara 25 razones por las cuales uno debería venir a saborear el Perú. Entusiasmado, me puse manos a la obra, sin saber que esto terminaría convirtiéndose en un terrible problema.
¿Cómo seleccionar 25 motivos? No me entiendan mal. Mi angustia no era porque no podría encontrar 25 motivos para venir a disfrutar de nuestra cocina. Todo lo contrario. Mi dilema era que había logrado reunir mas de 100 razones para venir a disfrutar los sabores del Perú, enamorarse de él y volver a casa a animar a todos a venir a visitarnos. La cocina como una poderosa herramienta de promoción turística que, al poner en valor nuestras experiencias, las convierte en historias únicas, mágicas y seductoras para aquellos que todavía no las han probado.
Son 101 experiencias peruanas convertidas en atractivos vivenciales, profundos, auténticos, coherentes y llenos de todos esos atributos que son los que hoy busca y valora el consumidor mundial.
1. Las picanterías arequipeñas.Las hermosas y aguerridas picanteras de Arequipa están más unidas que nunca por un gran sueño: hacer que los deliciosos platos de sus picanterías conquisten los corazones del mundo.
2. Los cangrejos reventados de Huanchaco.Cae la tarde, llegan los cangrejeros a la orilla de la playa de Huanchaco y los restaurantes como el Pisagua o El Caribe listos para hacer un cangrejo reventado para, literalmente, chuparse los dedos.
3. Café del Perú.Qué rico acabar una comida con un buen café. La buena noticia es que en el Perú contamos con cafés de talla mundial listos para gozarse en ese delicioso final que tanto se valora.
4.- El país de los cebiches.El mundo se ha enamorado del cebiche como un plato y un concepto. Es importante recordar ahora que el Perú es la capital mundial de ese cebiche que todos aman.
5.- El cacao peruano.El mundo ha recuperado el gusto por el cacao de verdad y las variedades únicas como las que hoy el Perú ya pone en valor y comparte para beneficio de sus pequeños productores.
6.- Los superfoods.El consumidor de hoy busca en un producto placer, salud y bienestar. Quinua, chía, maca, camu camu, camote, maíz morado, ajíes valorados no solo por ser ricos, sino por lo que en buena parte del extranjero se conoce como “health and wellness”.
7.- Un juguito.Nuestra inmensa variedad de frutas llena de exotismo nuestros jugos. La mano del peruano les da sabor único. Sea en una juguería como Las Delicias, sea en el mercado, un jugo surtido siempre será lo máximo.
8.- La calle Capón.Pasearse por el barrio chino limeño, tomarse una tetera de té jazmín acompañada de siu mais, hakaos, mimpaos o chanchito asado en el Salón de la Felicidad o el Salón Capón es compartir la multiculturalidad del Perú.
9.- El mercado de Belén.Parece que el gobierno ha decidido al fin poner en valor un mercado que, por su exotismo, podría ser el gran atractivo turístico de la Amazonía. Ojalá que así sea. Iquitos y el Amazonas tienen allí un gran tesoro.
10.- Un cebiche en Lagunillas.Llegar a la Reserva de Paracas y esperar que lleguen los botes a Lagunillas. Comprar la pesca del día directamente al pescador del bote. Ir con el pescado al restaurante de la Tía Fela y pedirle que una parte la fría y con la otra haga un cebiche. No tiene precio.
11.- Cocinando en los manglares.Una comunidad de pescadores de los manglares de Tumbes ofrece una experiencia mágica. Ir con ellos al manglar, buscar conchas negras, pescar róbalos o langostinos y luego regresar a su muelle privado para cocinar juntos el almuerzo. Un cebiche y un sudado. ¿Algo más?
12.- Almorzando con Hemingway.Bucear en la plataforma frente al muelle de Cabo Blanco y pescar con arpón unos deliciosos fortunos. Llevarlos al restaurante de la playa donde sus dueños muestran con orgullo su amistad con Hemingway. Un cebiche en la terraza, una langosta comprada en la orilla. El cielo.
13.- Una butifarra antes del teatro.Al lado del Teatro Segura, sigue el Carbone ofreciendo una de las mejores butifarras del Perú. Una butifarra, una cervecita y al teatro más feliz que nunca.
14.- Choclos camino a Machu Picchu.Quizás no lo saben, pero en verano los choclos del Valle Sagrado son los más grandes del mundo. Y, además, son deliciosos. Todos mis amigos cocineros lloran cuando los prueban.
15.- Miles de papas jamás vistas.Debemos recordarle al mundo que somos los inventores de la papa. Y qué mejor que hacerlo mostrando sus variedades más originales, como la novia que llora o la sangre de toro. Para ello, el festival de papas nativas se organiza cada año en todo el Perú. Los restaurantes haciendo platos únicos con papas únicas.
16.- Un almuerzo en Catacaos.Sus picanterías con sus tamalitos verdes y secos de chavelo, sus joyerías de plata y su gente amable. Visitar Catacaos para el almuerzo puede ser todo un descubrimiento.
17.- Pollo a la brasa peruvian style.Todas las cocinas tienen su pollo asado. Pero no todas tienen los ajicitos como acompañamiento y la sazón criolla de nuestros pollos a la brasa. Por ello, por único, es también ya un concepto en expansión internacional.
18.- Una huancaína en Huancayo.Coger el tren en Lima y partir hacia Huancayo, cruzando la cordillera, es una oportunidad para descubrir la magia del valle del Mantaro y sus pueblos cercanos, sus truchas, sus panes, sus lechones y, por supuesto, su famosa huancaína hecha a la antigua usanza.
19.- El cebiche también es a la brasa.Inspirado es las panquitas de life de Monsefú, Héctor Solís un día decidió ir más allá en su restaurante, el Fiesta. Hagámoslo con mero y que sea un cebiche a la brasa. Hoy es conocido mundialmente.
20.- Las bioferias.Empezaron en el parque Reducto de Miraflores, luego en otros distritos y ahora arrancan en provincias. Las bioferias son ya un atractivo más de nuestra gastronomía.
21.- Una parihuela en el Callao.Empezamos con un paseo por La Punta. Seguimos por Chucuito y terminamos en el Mateo con una suculenta parihuela.
22.- Anticuchos al caer la tarde.Sea donde Grimanesa, Pochita o en su esquina favorita. Los anticuchos son un ícono del Perú al atardecer.
23.- El alfajor también es peruano.En nuestro restaurante en San Francisco el público suele alabar mucho nuestros alfajorcitos con el café. Y suelen preguntarnos: ¿acaso no eran argentinos? Diferentes a los del país hermano, los alfajores también son peruanos.
24.- La avenida de los nuevos chifas.La avenida Aviación se ha convertido en el escenario de toda una nueva generación de chifas llegados de regiones diferentes a cantón. El chifa Haitá, el Four Seas, el Pac Man son solo unos entre más de una docena por descubrir
25.- El caldo levantamuertos.Mi gran amigo Alberto Chicote, famoso cocinero español, dijo hace unos días: “¡Que viva el caldo de gallina! Quiero la receta”. Le explicamos la receta y también que aquí vive un momento de apogeo. Hoy ya es un concepto.
26.- Comer en el mercado.Si vamos al mercado de Surquillo, esta El Cevichano o el Mercado Gourmet. Si vamos a Jesús María, deliciosas cebicherías; y en Magdalena, cocina amazónica. Comer en el mercado nunca tuvo tanto glamour.
27.- Vamos a Pachacamac.Almorzar en la casa de Don Cucho, en Chaxras o La Ladrillera en Cieneguilla es una oportunidad para disfrutar de un valle limeño que se resiste a perder la batalla contra la ciudad.
28.- Chicharrones.El cerdo está de moda en el mundo, sobre todo sus partes más grasositas y jugosas. Cuando el turista da una mordida a nuestro pan con chicharrón, descubre, además, un mundo nuevo de camotito, salsa criolla y ají. Se enamora.
29.-El mejor restaurante de América Latina.Central fue elegido por los Latin America’s 50 Best Restaurants como el mejor restaurante de la región en el 2014. Un honor que beneficia a toda la cocina peruana.
30.-El emolientero.Un personaje que finalmente es reconocido como siempre mereció. Su figura de curador de almas matutinas con sus pócimas de la naturaleza le aporta enorme originalidad a la propuesta gastronómica peruana.
31.- Tarapoto hermoso.De gente pujante, de paisajes idílicos, de enorme potencial turístico e industrial. Sus productos son únicos y sus tradiciones ni qué decir. Sus juanes, tacachos, cecinas. Viva Tarapoto.
32.- Huarochirí y alrededores.Las chirimoyas más hermosas del planeta habitan en Cumbe, cerca a Chosica. Muy cerca existen otros pueblos y valles llenos de tesoros esperando buenas carreteras que los conecten, políticas que los promuevan, visitantes que vayamos a disfrutar de su tierra.
33.- Surquillo.Aún no lo es, pero puede ser el gran distrito de la gastronomía, los artesanos y de la creatividad. Su mercado espera apoyo y una buena legislación, hace falta solo eso e inversión. El resto lo hará el joven peruano libre y creativo.
34.- Pueblo Libre.Museos, tabernas, calles peatonales. Pueblo Libre es uno de esos distritos tradicionales limeños donde sus vecinos pueden beneficiarse del turismo con poder adquisitivo.
35.- El ritual culinario.La pachamanca, más que un plato, es una ceremonia. Como lo es la huatia. Como lo es el chancho al palo o la caja china. Sin embargo, la pachamanca es mucho más. Es conectarse con los Andes, la tierra, la historia. Una fiesta que enriquece cualquier experiencia turística.
36.- Mistura.Cada año en setiembre vienen de todo el mundo miles de personas a Lima para visitar la mayor feria gastronómica del continente. Si bien hace años dejamos su organización, deseamos que siga logrando lo mismo por muchos años más.
37.- Sudado en la playa.Son muchas las playas de pescadores en las que podrá encontrar el mismo ritual. Comprar al pescador un pescado entero para entregárselo a su esposa, que cocina en un pequeño restaurante sobre la arena y nos hará un sudado al instante. Otro de los lujos modernos. Comer con la mano, chupar el hueso.
38.- La lima, la granada y la guayaba.Frutos de la Lima antigua que hoy viven un momento de esplendor en todo el mundo por motivos de bienestar, salud y exotismo. Recuperar estas frutas es aprovechar una gran oportunidad.
39.- La huatia surcana.Una oportunidad para poner en valor el pueblo antiguo de Surco, su gente y sus tradiciones. Entre ellas, la más emblemática, la huatia surcana. Pruebe la de la familia Solór-zano y comprenderá todo.
40.- El comfort food.El comfort food es la cocina más de moda en todo el mundo y es, precisamente, la que mejor define a la cocina peruana. La cocina generosa, de cuchara, a fuego lento, del guiso de abuela, la receta casera con destellos de creatividad, sazón y sentimiento. Como los peruanos.
41.- La cerveza del Perú.Tenemos cervezas regionales deliciosas. En Cusco, Arequipa, Trujillo, Amazonía y Callao, y tenemos ahora cervezas artesanales creadas por jóvenes peruanos. Todas listas para acompañar la expansión internacional de nuestra gastronomía.
42.- Sazón criolla.La presencia africana y española dialogando con nuestros antepasados fueron dando vida a una cocina. La cocina criolla. La del cau cau, la patita con maní y el ají de gallina. Una oportunidad para seguir rindiendo homenaje a nuestra Teresa Izquierdo.
43.- Tallarines verdes con apanado.Pocos saben en el mundo que el Perú tuvo una gran influencia italiana en su cultura culinaria más reciente. Ese viaje De Liguria al Callao dio vida a decenas de sabores, marcas y conceptos que podemos seguir divulgando.
44.- Rachi fashion.En el mundo hoy está en boga el consumo de interiores. En Nueva York y en Singapur. Y nosotros tenemos nuestros rachi, chanfainita, choncholí, patita, anticucho. Una deliciosa cocina peruana con muchos platos de interiores hoy buscados hasta por los niños.
45.- El tiradito tiene swing.Hoy el tiradito compite cara a cara en el mundo con el sashimi y ha hecho que el carpaccio sea historia. Nuestros tiraditos de mil colores creados por nuestros talentosos cocineros hoy tienen mucho swing.
46.- Habla, king kong.Tenemos una dulcería heredada del mundo árabe y español que se expresa de forma diversa y original a lo largo y ancho de todo el país. Guargüeros, ponderaciones, voladores, bienmesabes, ranfañotes, turrones y el infaltable king kong norteño.
47.- El puerto en la ciudad.La bahía de Lima es hermosa. Si no me creen, párense en el malecón de Chorrillos y obsérvela. Al final el muelle de pescadores sigue esperando que su autoridad lo ponga en valor y lo convierta en un pequeño pueblito de día y noche con pescadores y cocineros trabajando juntos para recibir a miles de visitantes.
48.- El valle más sagrado.Pasar unos días en el Valle Sagrado de los Incas, desconectado de todo, es una hermosa forma de conquistar amores hacia el Perú. Spas, centros vivenciales, pequeñas granjas y huertas orgánicas, mercados de productores y artesanos, paseos a caballo, pachamancas, huatias, meditación. Todo lo que el mundo valora.
49.-Qué rica chicha.Debido a sus pigmentos enmarcados dentro del health and wellness, el maíz morado en los próximos años se convertirá en un producto tan popular como la quinua. Y en esto jugara un rol muy importante su bebida emblemática, la deliciosa y heladita chicha morada.
50.-Los mejores erizos del planeta.Cuando llegan los cocineros más importantes del mundo a Lima, lo primero que piden son erizos y más erizos. Los han probado en todas partes, pero saben que los de Ático y Marcona son inolvidables.
Continuará…